
Esperanza Silva nos brinda grandes lecciones de vida: Es feliz y quiere ser una exitosa pastelera
Esperanza Silva es una niña de 8 años, paciente del Hospital Regional de Antofagasta que muestra un gran temple para resolver sus problemas, pese a que la vida le ha puesto hartas pruebas, ella toma los problemas como un desafío y los transforma en una oportunidad.
A veces los adultos bajamos la guardia, por distintas adversidades que el destino nos pone en el camino, sin embargo, existen seres que nacen para entregarnos una lección de vida, es el caso de Esperanza Silva, quien nació con labio-fisurado, sin embargo, ha sabido sortearlo con un gran carisma, ya que es una niña muy sociable e inteligente.
“Llegó como una sorpresa, ya teníamos programada nuestra familia, yo tenía 45 años. Vivimos muchos momentos de tristeza, ya que al quinto mes me informaron que venía con labio-fisurado. En ese momento necesitamos mucho apoyo de la familia, contención, pasando esta etapa vienen las alegrías, además de luchar en conjunto con los fonoaudiólogos, para mejorar su lenguaje y para que no tengan problemas en el Colegio, gracias a Dios le tocó un buen curso”, cuenta Liliana Carvajal, la madre de esta pequeña.
LA PROTAGONISTA
Tiene 8 años, asiste al Colegio San José, le gusta correr, jugar con sus compañeras y ser feliz, es lo que comenta la pequeña, además piensa que es fundamental contar con el apoyo de la familia, “mi sueño es hacer pasteles, algunas veces hago galletas con mi hermana”. La madre cuenta que: “Sueña con ser pastelera, nos ha hecho comprarle unas máquinas, compramos harina,
huevos se las lleva haciendo galletas, queques, le fascina hacer eso”.
SU EXPERIENCIA EN EL HOSPITAL REGIONAL
Llegó en un momento en que recién se estaba armando la Unidad de Fisurados en el Hospital, “me recibieron con los brazos abiertos, recién se estaban organizando haciendo actividades. Me demostraron un gran amor por los pacientes, como cuidarla, como tratarla. Lo mejor que hay es el apoyo psicosocial entregado por los profesionales”.
La madre de Esperanza Silva, entrega recomendaciones a las mamás que viven el proceso de un hijo con labio-fisurado:
“Aceptarlo, prepararse psicológicamente y pensar que no es una enfermedad grave, sino que todo lo contrario enfrentarse a las dificultades, los niños van a ser normales como cualquier otro”.
La pequeña además es muy inteligente salió con un 6,8 el año pasado, le gusta leer, ver TV.
La amiga y compañera de la madre que trabaja en un estudio jurídico en el sector centro de la ciudad, Sara Villalobos, explica que conoce a la niña desde los seis años, “La Esperanza es un caso es una niñita pequeña, pero muy independiente, habilosa, despierta no se le escapada nada, es divertida, sentimental, también es muy astuta”.
“Nos pasó que el año pasado ella estaba recién empezando el proceso del tema de sus dientes, un niño se le acercó y le hizo bullying, ella llegó desanimada, después de conversarlo con ella, se levantó y tomó energía como un ave fénix, ya que nosotras le dimos contención asimismo le explicamos como ella tiene que hablar con sus compañeros el proceso que ella vivió y que seguirá hacia adelante, a la fecha al parecer les comento a los compañeros y nunca más la abordaron. Para ella, esto le fortalece que puede enfrentar la vida, esto lo hace una niña súper fuerte”
“Me encanta ya que no se queda pegada en el pobre de mí, ya que ella todo lo transforma y cambia su manera de ver las cosas, ella es una lección de vida, valora de la amistad, si una compañera no la habla y busca el por qué trata de solucionarlo y no es rencorosa, es muy especial para mí”.