UN REGALO PARA YOSMIT
Yosmit es un paciente onco-pediátrico de tan solo 3 años que actualmente se encuentra internado en el Hospital Regional de Antofagasta. Diariamente Yosmit es trasladado por la Unidad de Movilizaciones hasta el Centro Oncológico del Norte, donde debe cumplir un programa de 25 sesiones de radioterapia.
Cuando debe trasladarse desde el hospital al centro oncológico, el pequeño siempre es acompañado de un familiar cercano, en este caso, su abuela Concepción Guasasa.
Recientemente, los trabajadores de la Unidad de Movilizaciones del Hospital Regional de Antofagasta decidieron entregar unos regalos a Yosmit, como muestra del cariño y empatía que ha despertado entre los funcionarios. Los trabajadores quieren, además, brindarle un momento de alegría al terminar uno de sus ciclos de tratamiento oncológico: “la misión de nosotros es facilitar el traslado de Yosmit todos los días. Es un bebé pequeñito que está pasando por una enfermedad muy fea y nosotros queremos apoyarlo con el traslado y también emocionalmente… entre todos juntamos dinero y quisimos esperarlo con unos presentes de cosas que le gustan como autos y juegos, etc”, expresó Alejandro Águila, Jefe de la Unidad de Movilizaciones del Hospital Regional de Antofagasta
Para sorprenderlo, los conductores y el jefe de la unidad de movilización escondieron los regalos dentro de una de las ambulancias de traslado y se apostaron en el estacionamiento de emergencias del Hospital Regional, a la espera de la llegada de Yosmit y su abuela que se trasladaban desde el Centro Oncológico del Norte como cada mañana.
Al llegar, Yosmit fue ayudado por uno de los “tíos conductores” como él mismo les llama, para poder bajar de la ambulancia y sentarse en su silla de ruedas. Yosmit no sospecha nada de la sorpresa que le espera en breves instantes, para él, este es un día rutinario de tratamiento y traslado de hospital a hospital.
Ya fuera de la ambulancia, Yosmit es saludado por otros “tíos conductores”, el jefe de la unidad de movilización y otros integrantes del equipo y funcionarios del centro de salud, en ese momento abren las puertas de la otra ambulancia estacionada y es allí cuando le entregan los obsequios. Yosmit sentado en su silla de ruedas y cubierto con todos sus elementos de protección, se ríe sorprendido y exclama “¡todos para mi!”, y entre aplausos y risas, los funcionarios le responden “sí, todos son para ti”.
Concepción Guasasa, abuela del pequeño paciente agradeció a todos los funcionarios por los regalos que llenaron de alegría a su nieto: “estamos muy agradecidos con quienes nos han apoyado, son personas muy amorosas y queremos que sane mi nieto… él es muy activo en todo, juega para allá y para acá, no le duele nada… y aquí estaremos hasta que le digan sus médicos”.